YanKemPo Mujer ( tallas small & standar )

YO-YO (tallas: small & medium)



Me gusta jugar al yo-yo porque sigo sin entender cómo diablos funciona. Sé que tiene algo que ver con la energía cinética y la madre que los parió, pero francamente debo haber faltado a esa clase de Física porque hasta ahora no sé a ciencia cierta qué carajo lo hace regresar hasta mi mano. También están los boomerangs. Juguetes hechos a nuestra imagen y semejanza: vuelven precisamente al lugar de donde los echan. ¿Quién los entiende? Nadie. Ya lo decía Don Ramón: vuelve la burra al trigo. Mi abuela tenía su propia versión: gallina que come huevo… ni aunque le quemen el pico

Canicas ( Tallas: small & medium)



Un niño puede tener de 20 a 40 canicas y aún así diferenciar a cada una de ellas como una loba hace con sus lobeznos. Un quiñe, una imperfección en el diseño son suficientes para recordarle dónde compró esta o a quién le ganó aquella. Saben cuales se deslizan mejor sobre la arena y cual si se tratase de galgos corredores, saben cuales atraviesan una buena racha y cuales sólo sirven como carne de cañón. Una canica no cuesta más de diez céntimos, pero se ganan en los recreos a costa de puntería y orgullos heridos y por eso no hay nada mejor que al final del juego sentirlas chocar dentro del bolsillo, cual soldados que vuelven salvos a casa después de la batalla

Yaxes ( tallas: small & standar)



Los yaxes son el equivalente femenino a las canicas. En el cole te decían que si jugabas mucho se te malograba la letra, pero preguntó yo ¿de donde salió esa teoría? Lo que creo es que de alguna manera querían controlar lo que sucede cuando a las mujeres se nos da por competir entre nosotras; y es que no hay nada más peligroso que una mujer herida en su orgullo, o perder en LEVIS CON PALMADA, que para la edad era lo mismo

Todo se compra, todo se vende... ( talla: standar)



Yo vine a Lima a los 13 así que hasta entonces mi imagen mental de esta ciudad se formó mirando aquel tablero de calles y trenes.

Gran desilusión descubrir a mi llegada que la avenida L no queda al lado del viejo Jirón y que Nicolás de Piérola no es una calle verde llena de árboles sino gris y atravesada por viejos colectivos

Pero sobre todo, que duro golpe descubrir que comprarse una casa en Miraflores no cuesta cuarenta soles y que nadie te detiene en la calle a media mañana para regalarte veinte monedas por haber ganado el segundo puesto en un concurso de belleza

www.zropunto1.blogspot.com

YanKemPo. Hombres ( talla: standar)

Mundo ( talla: small & standar)


"La rayuela se juega con una piedrita que hay que empujar con la punta del zapato. Ingredientes: una acera, una piedrita, un zapato, y un bello dibujo con tiza, preferentemente de colores. En lo alto está el Cielo, abajo está la Tierra, es muy difícil llegar con la piedrita al Cielo, casi siempre se calcula mal y la piedra sale del dibujo. Poco a poco, sin embargo, se va adquiriendo la habilidad necesaria para salvar las diferentes casillas y un día se aprende a salir de la Tierra y remontar la piedrita hasta el Cielo, hasta entrar en el Cielo” (Julio Cortázar – Rayuela)

Trompo ( tallas: small & medium )



Tener diez años y subirte el trompo a la palma de la mano es el equivalente adulto a sacar la licencia de conducir. No todos lo consiguen. Toma arte y tiempo y cuando por fin lo logras, euforia total y a ponérselo delante de la ñata a todos los amigos. Con la práctica consigues levantarlo con la huaraca, bajarlo de una mano a otra y hasta dar un latigazo como el zorro y hacer volar hasta tu mano aquel pequeño satélite de clavo y madera. Dicen que los adultos fuman porque le gusta tener un pequeño incendio entre los labios. Un niño logra lo mismo con el mundo, haciendo orbitar un trompo sobre su mano.

Todo se compra, todo se vende... Tallas: small & standar)